Hola, amigos. Hoy el departamento de divulgación científica de latiendawapa os va a explicar la diferencia entre una receta y una receta-chof.
Veréis: una receta es aquel papel, ya sea suelto o encuadernado con otros iguales en forma de libro, en el que se detalla minuciosamente la manera de preparar un plato.
Es muy útil, en especial para justificarte ante tus invitados echándole la culpa si la comida sale mal. (Ya sabemos que tú cocinas divinamente.)
También sirve para que te preguntes cómo hacen para que no se pegue el arroz y para que la deconstrucción de pulpo con acelgas no explote, como te pasa a tí.
Pero en cualquier caso, lo importante es que las recetas, bien sueltas o arrejuntadas se colocan en un atril de libros. Un precioso atril para cocina como este que ves arriba, por ejemplo, o como otros que puedes encontrar en la tienda, pinchando aquí. Entonces sí que la puedes llamar receta.
Y si eso es una receta, ¿qué es, entonces, una receta-chof? os estaréis preguntando.
Pues exactamente lo mismo, pero sin atril. Porque entonces estará encima de la encimera, valga la redundancia, y a cada momento ¡chof! la estarás manchando, ¡chof! ahora con bechamel, ¡chof! luego con nata y finalmente ¡chof! con los restos de la explosión del pulpo con acelgas.
Así que ya lo sabes. Si no quieres recetas-chof, necesitas un atril.