Ya conocéis nuestra nueva gama de puffs arcón. O eso creíais. Porque este nuevo modelo de puff arcón plegable nos llega con el traje de los domingos para distinguirse del resto.
Es que ha nacido así, no lo puede evitar. En lugar de una piel estampada como sus hermanos de gama, estos dos modelos se visten con una cubierta muy especial, en tres dimensiones, llena de reflejos de oro y plata. Son los aristócratas de los puff arcón, en versión Silver and Gold.
Es como si estos grandes baúles y asientos auxiliares se hubieran vestido para una boda. Pero sin la resaca, y gastando veinte veces menos.
Son… ¿cómo los definiríamos? Si fueran un animal, serían un perro afgano. Si fueran libro, sería de Proust. Si fueran mamíferos superiores, serían Brad Pitt. Y si fueran coche sería un Bugatti de los años 30.
Pero no creáis que son estirados, como los de arriba de Arriba y Abajo. No. Estarán encantados de integrarse en vuestros salones y habitaciones, porque al fin y al cabo juegan con ventaja. Saben que serán protagonistas en vuestra decoración, por eso llevan puesta esa sonrisa de ganador.
En lo que sí son iguales a sus hermanos es en su triple vocación de almacenar, decorar y servir de asiento: baúl, puff y caja todo en uno.
Hay que señalar que aunque los seres humanos solo tenemos un trasero, este puff viene con doble ancho, de modo que caben dos. La clave está en que sean bien avenidos, porque la comodidad la trae de serie.
Respecto al espacio, son tan grandes por dentro, que hemos probado a meter a señores con bigote y caben perfectamente, siempre que no sean muy barrigones.
Ya lo veis: para ser más perfectos que estos puffs tendrías que ser el abuelo de Heidi. Mientras duren, los puedes admirar en la tienda, mientras duren.