El mejor amigo del hombre no es el perro: son las mantas de sofá

Se suele decir que el mejor amigo del hombre es el perro. ¡Qué va!

Resulta que el M.A.N.T.A. (Movimiento Analizador de Nevas Técnicas de Acaloramiento) de latiendawapa ha descubierto que eso ha quedado anticuado. Que el mejor amigo del hombre y de la mujer de hoy en día son las mantas de sofá.

Porque en cuanto aparecen los primeros fríos de la temporada, a los seres humanos (sí, eso incluye también a los cuñados) nos crece un apéndice que los científicos están pensando en incorporar como nueva extremidad a la anatomía humana: la manta de sofá.

¿Y por qué es así?

  • Porque las mantas de viaje o sofá tienen el tamaño justo para cubrir nuestro espacio personal.
  • Porque las sentimos tan nuestras y cercanas como nuestra ropa.
  • Porque tienen un tacto suave y gustoso, como si tuviéramos un gatito de metro y medio acariciándonos continuamente.
  • Porque nos brindan calor y confort, que para fastidiar ya están los de la oficina. Manta de sofá varios colores

Y porque la sensación de arrellanarse con una manta en el sofá al llegar a casa después del trabajo para leer o ver la tele es tan placentera que para encontrar algo que te dé más placer tendrás que esperar a que se duerman los niños.

¿Y quién se resiste a los placeres sencillos?

La manta de sofá, el sofá y tú, trío inseparable

A partir de este momento las mantas pasan a ser una pieza más de la decoración de nuestros salones, integradas en una trilogía formada por la propia manta, el sofá o sillón y tu propia persona. Es que, confiésalo, siempre quisiste hacer un trío.Manta de viaje de microfibra

Por eso, y aunque este otoño se está pareciendo al Gobierno (queremos decir, que viene con retraso), ya estamos deseando que venga el frío para acurrucarnos con las mantas.

Las mantas de sofá, o de viaje, como también se llaman, ya no son un recurso de adorables ancianitas que hacen calceta en su sillón de orejas mientras escuchan la radio.

Las mantas para toda ocasión y con toda variedad

Hoy en día son para todas las edades, para todos los hogares y para todas las situaciones. Por ejemplo, mete una en la maleta cuando salgas de viaje o fin de semana, que no hay nada peor que llegar al refugio de montaña y comprobar por las malas que han decidido ahorrar… en la calefacción.Manta de microfibra para sofá

Y también son perfectas para poner a los pies de la cama, o cubriendo camas pequeñas.

Además, presentan un montón de variedades, texturas, estampados y colores.

Tienes mantas polares muy finitas y ligeras; el tejido polar es tan ligero que casi no se sienten pero calienta ocupando el mínimo espacio en el armario.Manta lila para sofá

También tienes mantas de pelo sintético, con más cuerpo, acariciadoras y suaves, para cuando quieras un tacto más rotundo y calorcito XXL.

Y en el terreno intermedio, las mantas de microfibra son ni muy finas ni muy gruesas, pero poseen un tacto más suave y acogedor que el cachorrito del anuncio de Scottex.

Y con estampados diversos y gamas casi infinitas de colores el único problema será decidir la que más te gusta.

¡Ah! No solo son los mejores amigos de los seres humanos, sino que también lo son de perros y gatos. Una vez tu mascota ha tomado posesión de su manta, olvídate. Sería más fácil quitarle a Messi sus balones de oro que la manta a tu mascota.

Así que ya lo sabes: este invierno, acurrúcate con tu mejor amigo: la manta de viaje.Manta estampada con leopardo