Actualizamos este antiguo post porque según ha ido creciendo la gama de alfombras de vinilo en los últimos tiempos hay cada vez más cosas que contar sobre el éxito y la funcionalidad de estas alfombras.
Por eso os hemos preparado un súper post para explicaros lo que son las alfombras vinílicas y cómo han evolucionado, porque lo han hecho como el vino en barrica de roble: a mejor.
El concepto de alfombra vinílica, sintética o de PVC era inexistente hace sólo unos años, y ahora encontramos en el mercado una enorme variedad de alfombras de vinilo que nos alegran los suelos y nos ayudan a decorar haciéndonos la vida más fácil.
¿Y cómo ha sido posible? Porque son el resultado del avance de la investigación en materiales aplicado a la decoración.
Primero, la materia prima
Así que, empezando por el principio, vamos a hablar de su materia prima: las fibras sintéticas.
Aunque hay varios tipos de alfombras sintéticas, la mayoría de alfombras vinílicas tienen como base el polipropileno, Leno para los amigos.
Es un material termoplástico joven, brillante y llamado a hacer grandes cosas.
Nació entre probetas, de modo que no tiene padre, pero tampoco lo tenía la oveja Dolly, así que no pasa nada.
Este material tiene más usos que una navaja suiza con toma USB y antena parabólica, aunque lo que nos interesa ahora es que con él se pueden hacer trenzados finos, maleables y súper resistentes, lo cual lo hace ideal para elaborar alfombras de vinilo o polipropileno.
¿Por qué es tan bueno el vinilo para hacer alfombras?
- Es extraordinariamente resistente
- Es reciclable al 100%
- Posee una elevada rigidez estructural
- Tiene una enorme resistencia a la abrasión
- Es de baja densidad y por tanto ligero y altamente flexible
- Presenta un acabado cálido y acogedor.
- Y por último y en absoluto menos importante, es bueno para el medio ambiente
Y no solo para el medio ambiente… para el otro medio también. Porque se fabrica con procedimientos de los menos contaminantes y se puede incinerar sin efectos nocivos.
Por todo esto el vinilo es lo que se dice el yerno perfecto. En eso sólo le supera Andrés Iniesta.
¿Qué hay que saber de las alfombras de vinilo?
Vale, lo de el vinilo y el polipropileno está entendido. Y de las alfombras vinílicas, ¿qué hay que saber?
El nombre de la cosa
En primer lugar, cómo se llaman. Porque hay cierta confusión sobre los términos, ya que hay quien las llama alfombras vinílicas, o alfombras sintéticas, o de fibra, o de polipropileno. También hay quien las llama keplan, o alfombras modernas…
No importa. Llámalas como quieras, que no se van a enfadar. Lo importante es que son alfombras de trenzado vinílico o de PVC pensadas para hacer grandes cosas por la decoración de los suelos.
Los estilos de las alfombras de vinilo
¿Cuál es tu estilo de decoración? Con las alfombras sintéticas no importa, de veras.
Las alfombras vinílicas se suelen asociar a ambientes o estilos de decoración de corte minimalista, nórdico o escandinavo. Y no vamos a decir que no.
También casan bien con estilos urbanos, modernos, actuales y contemporáneos, y tampoco vamos a llevar la contraria.
Porque están basadas en una estética sobria sin ser aburrida, discreta sin ser triste, tranquila pero a la vez animada. Son alfombras que, como reza el dicho, alcanzan la perfección no porque no tengan nada más que añadir, sino porque no tienen nada más que quitar.
Con vocación ecléctica y ecuménica, si nos permitís el término, estas alfombras cubren un rango amplio de estilos con el que pueden convivir ambientes muy diversos.
Características de las alfombras de vinilo
Durabilidad
Si has tenido alguna vez alfombras frágiles, de esas que duran menos que un billete de 5 euros, entenderás la importancia de la durabilidad aplicada a las alfombras.
Las alfombras de vinilo duran, literalmente, lo que tu quieras. Son las alfombras que acabarás cambiando solo porque te da la gana o porque te canses de ellas, porque, como Jordi Hurtado, no envejecen.
No les suena la campana, no se afean, no se desvaen. Si tienes dudas sobre estas alfombras, intenta buscarles otro punto débil, porque en cuanto a la durabilidad, no lo vas a encontrar.
Resistencia
Una de las propiedades del vinilo es la gran resistencia a la abrasión, de modo que estas alfombras vienen preparadas para aguantar el trote de una brigada de infantería en maniobras, tanques incluidos.
Son tan resistentes a la abrasión que incluso aguantan la proyección de diapositivas del viaje de tu cuñado. Son, dicho de una manera tan cruda como sencilla, indestructibles.
Amigas de las mascotas y de los niños
Son tan fuertes que aguantan incluso sillas de despacho con ruedas. Y las mascotas no pueden con ellas, a no ser que tu mascota sea un cocodrilo del Nilo (esto mejor no lo intentes en casa).
Gatos, perros y demás fauna convive con las alfombras vinílicas en paz y armonía, sin causarse daño alguno mutuamente. Por eso decimos que las alfombras sintéticas son las mejores amigas de las mascotas.
Y si hablamos de las otras fieras que tienes en casa, esas con dos patas, de metro y poco y actividad incansable, no te preocupes: ni los niños acabarán con las alfombras ni las alfombras se enterarán de los peques.
La alfombra más fina y antideslizante
Las personas mayores, o las no tan mayores pero propensas a tropezones, agradecerán una alfombra fina, que se pegue al suelo y apenas levante unos milímetros. Porque son un seguro anti resbalones y anti tropezones.
Igualmente, al ser muy planas parece que las alfombras de vinilo forman parte del suelo, lo cual va muy de acuerdo con el carácter sobrio y minimalista que confieren a la decoración.
Las alfombras de vinilo no sólo evitan tropiezos y resbalones por ser finas, sino que en el reverso de todos los modelos encontramos capas de goma que hacen que se agarren al suelo con más fuerza que un concejal imputado a su escaño.
Es un extra de seguridad que nunca está de más en nuestras casas.
Vale pero… ¿en dónde las puedo poner?
Igual que el perro es el mejor amigo del hombre por haberle acompañado hasta el último rincón del planeta, las alfombras sintéticas son el mejor amigo del hogar, porque le pueden acompañar a cualquier lugar, por extraño que sea, en el que haga falta poner una alfombra.
Valen para interior y para exterior
Existen muchos tipos de alfombras muy bonitas y prácticas… siempre que no las saques de su zona de confort. Sin embargo, las alfombras vinílicas no tienen zona de confort específica porque su zona de confort es… cualquiera.
Dentro o fuera de casa.
Porque esa es una de sus grandes virtudes: su polivalencia interior/exterior.
El día que Coco explicaba en Barrio Sésamo la diferencia entre “dentro” y “fuera” estas alfombras no vieron el programa, de manera que crecieron indiferentes al concepto interior o exterior, porque tanto les da.
Llévala a la piscina
Debemos advertirte que hay un requisito importante para llevar las alfombras de vinilo a la piscina: tener piscina. Por lo demás, estas alfombras están deseando ponerse al lado del agua, dulce, salada o mineral, si es preciso.
Especiales para la entrada y lugares de mucho paso
Los pasillos de edificios públicos, terrazas, salas de espera, recibidores y lugares similares son zonas muy castigadas por el paso constante de gente.
Y si en las distancias cortas es cuando una colonia se la juega, en el paso intenso de gente es donde una alfombra demuestra si tiene lo que hay que tener. Las alfombras de vinilo no tienen rival en lugares transitados, tanto por el paso de gente como por sillas, carritos y demás artilugios con ruedas.
La cocina, otro de sus hábitats naturales
Las alfombras de vinilo cumplen los dos requisitos básicos que les pedimos a las alfombras de cocina.
En la cocina queremos alfombras trotonas, inmunes a los accidentes, que no sufran con el maltrato.
Y en segundo lugar, que si se maltratan (lo que ocurrirá con certeza) se puedan limpiar y volver a estar como nuevas con facilidad.
Despacho, terraza, garaje…
Las alfombras de vinilo o sintéticas ofrecen la mezcla perfecta de sobriedad, elegancia y utilidad que necesita un despacho, tanto profesional como el que tenemos en casa.
Y siempre están dispuestas a trabajar duro para estar en la terraza, en el garaje, el porche...
Salones, habitaciones y pasillos
No te vamos a cansar porque ya sabes lo que es una casa, y en qué lugares puedes colocar una alfombra práctica y bonita. Pues para cada uno de esos sitios hay una alfombra de vinilo capaz de lucir palmito y hacer un gran trabajo.
Son cálidas en habitaciones, robustas en pasillos y terrazas y vistosas en los salones.
¿Y cómo las limpio?
Fáciles de mantener y limpiar
La ley de la gravedad, inexorable como es, se empeña en hacer que todo caiga hacia el suelo. Y las alfombras, inevitablemente, están en el suelo, recogiendo toda la suciedad, quieras que no.
No sabemos si la gravedad lo hace aposta, pero la solución a este problema es tener alfombras que se limpien con facilidad. Que no necesiten protocolos, procedimientos y sistemas de limpieza extraños, caros y complicados.
¿Qué te parece limpiar las alfombras con una fregona? ¿O mejor aún, con una manguera? O con escoba, con aspirador o como más rabia te dé, porque, como hemos dicho antes, a estas alfombras las puedes maltratar tanto como quieras.
Ideales para personas con alergias
Para mantener la limpieza no hay mejor manera que evitar la acumulación de polvo. Y eso se consigue con superficies lisas, incapaces de acumular polvo en sus recovecos, por la sencilla razón de que no tienen recovecos.
Así, cada vez que les pasas la fregona, escoba o aspirador no queda nada oculto acumulando polvo, ácaros y demás agentes causantes o agravantes de las alergias. Y los habitantes de tu casa te lo agradecerán, y no sólo los alérgicos.
Diseño y decoración, los otros ingredientes
Un gran material como el vinilo no es nada si no se hace con él un gran producto. Por eso se siguen reeditando los mejores discos de la historia en vinilo, por ejemplo.
Y las alfombras de vinilo no quieren ser menos, y además de heredar todas las características que hacen del polipropileno un material estupendo, le añaden algunos componentes más, como el diseño y la decoración.
Transmiten calidez y naturalidad
Si tal vez el término “alfombras sintéticas” te suena a frío o impersonal, las alfombras vinílicas de hoy en día tienen una variedad de texturas y diseños que les permiten rivalizar con las alfombras textiles en cuanto a calidez y naturalidad.
Variedad de trenzados, medidas y colores
Ya dijimos que las alfombras sintéticas son el resultado del avance de los materiales aplicados a la decoración de los suelos. Y esa investigación es lo que ha hecho crecer la gama de texturas y trenzados de las alfombras vinílicas para que sea más larga que la gala de los Oscar.
La variedad de estas alfombras no solo alcanza a los trenzados, sino que si hablamos de medidas y colores llegamos a la conclusión de que hay más variantes que los decimales de pi. Todo sea porque no haya lugar que se quede sin su alfombra de vinilo.
Con esta actualización os hemos querido poner al día de lo que suponen las alfombras de vinilo en la decoración de los suelos de hoy en día. Un recurso decorativo tan práctico como útil, destinado a hacer nuestra decoración más fácil y nuestros suelos más bonitos y duraderos.