Aunque su nombre pueda confundir o parecer raro, cuando hablamos de alfombras de viscosa no queremos decir que sean alfombras hechas con un fluido espeso que se nos escurre de entre las manos y que se derrama por las esquinas.
No. El nombre viene del material con el que se confeccionan, que se denomina… viscosa, valga la redundancia.
Ya. Seguramente estaréis pensando que le podían haber puesto otro nombre, y no os vamos a decir lo contrario.
Y seguramente por eso también se le conoce alternativamente como seda artificial, que además de ser una denominación mucho más bonita, resulta muy apropiada porque el tacto de la viscosa es suave y sedoso como la seda. Es decir, lo contrario de lo viscoso.
Las alfombras de tacto suave
Con el material viscosa se confeccionan muchas cosas: ropa, cortinas y otros productos textiles… y por supuesto, alfombras.
Ya hemos dicho que se caracteriza por su brillo y tacto suave, y añadiremos que además de sedoso es cálido, acogedor, amoroso, gustoso y varias cosas más que terminan en -oso.
La fabricación de la viscosa es curiosa, porque es una fibra artificial hecha enteramente a partir de fibras naturales. Como la cuadratura del círculo, pero en alfombras.
Las materias primas usuales son el algodón y la madera, que se tratan y tras varios procesos terminan en una fibra que destaca por su tacto, brillo y textura. Así que es medio natural, medio artificial: una combinación de los dos mundos.
Y ya que hablamos de combinar, es un hilo que se mezcla bien con otros, de modo que, además de las alfombras de viscosa 100%, también se pueden tejer alfombras mixtas, con aportación de lana, poliéster, acrílico, algodón…
Ya veis que es un material muy maleable que, a diferencia de Trump, se lleva bien con todo el mundo. Tiene un brillo característico, que le da mucha viveza.
Dependiendo del trenzado se pueden hacer alfombras de viscosa muy brillantes, o disimularlo para crear texturas ricas pero con cierto brillo ma non troppo.
Las características del hilo hacen que se puedan confeccionar alfombras finas, y así son la mayoría de las alfombras de viscosa: alfombras flexibles, ligeras y de poco grosor.
No las busquéis con pelo largo: no es lo suyo. Su tejido no es apropiado para eso, sino que quieren reinar en el hábitat de las alfombras delgadas y elegantes que destacan por su clase y la finura de su diseño.
Brillo o textura, lisa o relieve: una alfombra con recursos
Además de finas, con la viscosa se pueden tejer alfombras completamente lisas, pero también se confeccionan con relieve, jugando con el detalle y recortado de su pelo corto, lo que destaca muy especialmente en diseños de tipo geométrico o floral.
También se puede trenzar el motivo principal de viscosa sobre una base de otro material, destacando el diseño por el contraste entre distintas fibras.
Son alfombras de tacto suave, ya lo hemos dicho, pero especialmente de las que gusta pisar con los pies descalzos (lo cual es la prueba definitiva para una alfombra).
El carácter de las alfombras de viscosa es muy definido. Si fueran libros, serían de Jane Austen, no el manual de instrucciones de una motosierra.
Si fueran música serían una sinfonía barroca antes que un concierto de heavy metal. Y si fueran comida serían una espuma de hojaldre antes que un chuletón con patatas.
Porque no han venido a decorar por fuerza bruta, ni pretenden ser las alfombras más duraderas y prácticas que existen.
Esa batalla se la dejan a otros tipos de alfombras. Las alfombras de viscosa, en cambio, buscan la distinción en su finura (en ambos sentidos, literal y figurado) y sus diseños, que, con independencia que sean clásicos o modernos, lisos o estampados buscan siempre la elegancia en la decoración de los suelos.
Es importante entender que son alfombras más delicadas que otros tipos de alfombras más populares. No las recomendaríamos para lugares de paso o tráfico intenso (entradas, pasillos), ni para el comedor si tus hijos invitan a comer con frecuencia al equipo de fútbol, que llegan con las botas puestas.
Igualmente si tu mascota tiene predilección por destrozar alfombras, no te vamos a engañar: tendrás un dilema: o la mascota o la alfombra. Y para el exterior… ni lo intentes. Tampoco son recomendables para estancias con humedad como baños o cocina.
Cada cosa tiene su encaje y su lugar, pero en salones con uso normal las alfombras de viscosa son una alternativa original, vistosa y con clase para decorar los suelos.
Mantenimiento y cuidados
Y estarás pensando… “sí, pero… ¿y el mantenimiento?” Porque podemos aceptar tener alfombras algo delicadas si nos aportan un plus a la decoración, pero no queremos estar limpiándolas y llevándolas a la tintorería todos los días.
Su cuidado no es tan sencillo como otros tipos de alfombras prácticas, pero tampoco es el fin del mundo.
Por supuesto, la prevención es la mejor aliada de la limpieza de alfombras, de ahí que hayamos insistido en la idoneidad de cada tipo de alfombra en función del lugar en el que van a estar y el uso que van a recibir.
¡La alfombra que no se mancha es la que mejor se limpia!
Dicho esto, y en primer lugar, la mayoría son alfombras lisas y sin pelo, lo cual de entrada ya impide que se acumule el polvo, y eso siempre es una buena cosa.
Por tanto, la limpieza frecuente con el aspirador es nuestro principal aliado. Si el aspirador tiene cepillo giratorio es mejor desactivarlo o poner otra boca sin cepillo; es una precaución adicional que nunca está de más.
En función de las indicaciones de cada alfombra en concreto en ocasiones se podrá limpiar a mano actuando con un paño húmedo sobre las manchas, evitando productos químicos o detergentes agresivos.
Aunque hay que tener en cuenta que el peor enemigo de una alfombra 100% viscosa es el agua. Por eso es muy importante seguir rigurosamente las indicaciones del fabricante en cuanto a la limpieza.
Si llega el momento que a pesar de los cuidados cotidianos la alfombra necesita un repaso mayor, entonces buscaremos la limpieza profesional.
En resumen: las alfombras de viscosa son alfombras finas, sedosas y elegantes pensadas para vestir suelos de manera elegante. Colócalas en el lugar adecuado, y con cuidado y mucho mimo tendrás alfombras espectaculares para mucho tiempo.
También te puede interesar…