50 sombras de gris: el discreto encanto de las alfombras grises

Vamos a hablar de alfombras grises. Y puede sonar paradójico, ya que, excepto en el No-Do, la vida es en color. Nuestras casas y decoraciones también son en color y nuestras vidas están llenas de colores, no solo en las pantallas que no dejamos de mirar, sino en la vida real (cuando levantamos la cabeza).

Así que, ¿por qué íbamos a querer alfombras grises en nuestra decoración?

Por muchas razones, como su discreto encanto en primer lugar. Y porque no hay color como el gris para sacar lo mejor de los otros colores. Para aislarlos, potenciarlos y, como se dice ahora, ponerlos en valor.

Por cierto que cuando hablamos de alfombras grises nos referimos a todo el espectro monocromo: a las 50 sombras de gris, desde el gris más clarito al gris-oscuro-casi-negro con todas sus combinaciones.

Alfombra vinilo gris

Las propiedades de las alfombras grises

El gris tiene muchas propiedades terapéuticas, hasta el punto de que si fuera un medicamento sería casi una panacea.

Es antipirético, antiinflamatorio, hipotensor, relajante y lo que es mejor, apenas se le conocen incompatibilidades ni contraindicaciones. Cuando hablamos de alfombras grises no es necesario leer el prospecto, primero porque no lo traen, y segundo, porque lo que ves es lo que hay, sin más trampas ni artificios.

El dibujante de carboncillo sabe que los tonos blancos -que no se dibujan- son más importantes que los tonos oscuros que traza. Pero sin dibujarlos, los blancos aparecen como por arte de magia cuando, una vez completados los trazos oscuros, saltan al primer plano, por oposición.

Pues igual hacen las alfombras grises. Se comportan como si el grupo parlamentario de la oposición tuviera más poder que el propio gobierno. Porque definen y matizan los ambientes con su mera presencia, creando un marco de referencia. Por decirlo a lo moderno, el relato es suyo.

Alfombra invernal en tono gris

Poner alfombras grises no significa verlo todo en blanco y negro, como las cebras o las pelis noruegas de arte y ensayo. Ni que sientas por los colores vivos la misma indiferencia que un concursante de First Dates por la Biblioteca Nacional. Significa decorar con sentido, descubriendo las claves de las combinaciones de color.

Pero mejor vamos a ver con 10 ejemplos…

Qué puede aportar una alfombra gris a la decoración

Nota: Salvo que se hayan agotado posteriormente, todos los modelos están disponibles en nuestra tienda en el momento de publicar este post.

1. Continuidad cromática

Alfombra a medida gris

Es difícil pensar que este dormitorio pudiera albergar una alfombra que no fuera gris. El modelo elegido es el Epsilon, que ofrece una textura viva con aguas marcadas y una fuerte personalidad que salta a la vista.

La continuidad cromática de paredes, cama, cuadro y cortina queda acentuada por la alfombra de generoso tamaño, que sirve para hacer un enmarcado inverso del elemento que hace que todo el entorno cobre sentido: el suelo de madera clara que, con las mesillas, es el único elemento que no es gris y que se convierte por obra y gracia de la oposición de la alfombra en la piedra angular que sostiene toda la bóveda decorativa.


2. Efecto antiinflamatorio

Alfombra de vinilo gris

Esta decoración con alfombra de vinilo modelo Chicago ejemplifica como pocas cómo una alfombra gris puede ser el antiinflamatorio que sugeríamos antes.

En un ambiente con una fuente de color viva y energética como el naranja de la pared, una gran planta verde intenso y una ventana a través de la cual el sol entra a raudales, una alfombra que no fuera gris provocaría una inflamación colorista de imprevisibles consecuencias. En este ejemplo la alfombra atempera el ambiente y centra el disfrute colorista en sus justos términos.


3. Diferentes estados de ánimo

Alfombra lisa gris
Alfombra gris oscuro
Alfombra lisa teja

Para este ejemplo nos sirve el modelo Adalia de pelo corto. Aquí comparamos un gris claro con un gris más oscuro y con otro color no-gris: un teja vivo.

No hay combinación ganadora, sino diferentes estilos o, por mejor decir, diversos estados de ánimo que nos sugiere cada combinación de color. Los grises son más reflexivos y tienden a suavizar el ambiente, que ya es suficientemente alegre y luminoso como para no necesitar sobredosis. Por el contrario, el naranja estimula la decoración con más empuje, lo cual está muy bien… siempre que sea ese efecto el que estás buscando.


4. Minimalismo que refuerza

Alfombra Teplon Shadow gris

El carácter sobrio, minimalista y moderno de las alfombras vinílicas queda de manifiesto en este ejemplo, para el que hemos utilizado el modelo Teplon Shadow, color 611.

La alfombra gris sobre pared gris nos establece un marco austero pero con mucha vida a partir del cual cada elemento que se añada tendrá la responsabilidad de encajar y mejorar la decoración, porque va a destacar y ser protagonista. Por ejemplo, el mostaza de la butaca encuentra en el gris su razón de existir ya que le permite exhibir y potenciar sus líneas de diseño vanguardista.


5. Diferencia de caracteres

Alfombra gris claro pelo corto
Alfombra gris oscuro

La comparación de la misma alfombra, modelo Ornella, en el mismo ambiente cambiando solo el tono de gris nos deja dos conclusiones. La primera, que la madera del suelo y del mueble del fondo queda reforzada por el gris de la alfombra, sea cual sea.

Y la segunda, que incluso así parece que se trata de habitaciones distintas, con el gris oscuro definiendo los espacios de manera mucho más enérgica, casi militar, gracias a su fuerte contraste, especialmente con el sofá claro. Es una elección entre suavidad y carácter.


6. Contemporizador perfecto

Alfombra pelo corto gris

La alfombra Econyl Finisterre nos enseña cómo, en una estancia que tiene sobradas fuentes de luz y de materiales cálidos, el gris es un regulador insustituible.

Los grandes ventanales, la cortina roja y la pared de madera aportan toda la dosis de energía y color que necesita el ambiente, de modo que la alfombra gris (puesta en modo moqueta en este caso) no tiene nada más que hacer que entender su papel de contemporizador apartándose del primer plano para conseguir una decoración perfectamente equilibrada.


7. Realzar el entorno

Alfombra rústica gris

El estilo rústico de las alfombras de polipropileno o sisal sintético (en la foto, modelo Darien) se presta también a crear preciosos ambientes llenos de naturalidad.

En este ejemplo, la alfombra, conocedora de su papel, sabe que no le puede robar protagonismo a la gran mesa de madera ni a los espléndidos bancos. Se limita a acompañar sin estorbar, dejando que el suelo de tablones luzca por debajo con su encanto rústico.


8. ¡Me gustan los grises!

Alfombra vinilo gris

A veces el motivo para elegir una alfombra gris es tan sencillo como que nos gustan los grises. Y punto. Y si alguien piensa que un ambiente monocromo es aburrido o cansino, no tiene más que ver este ejemplo de alfombra de vinilo Teplon para convencerse de lo contrario.

La iluminación generosa, los contrastes entre suelos, paredes, alfombra y sofá, la diversidad de complementos que orbitan sobre el mismo concepto nos demuestran que tu decoración no tiene que parecerse al salón de reuniones de una comparsa de Carnaval para ser sugestiva y plena.


9. Equilibrio contemporáneo

Alfombra moderna gris

Las alfombras modernas como este precioso modelo Abstracción tienen el deber moral de no guardar compromisos a la hora de decorar con los mandamientos de la modernidad.

El monocronismo es una de sus principales herramientas, ya que les evita distraerse con cuestiones y florituras ajenas a su esencia: la expresión artística aplicada a la decoración contemporánea. En esta alfombra gris, las líneas pulcras y elocuentes de sus trazos se sostienen y refuerzan mutuamente con el tono gris neutro del fondo, que encaja en la estancia como un agujero negro en el centro de la galaxia.


10. Confraternización rústico-moderna

Alfombra lisa y gris

La facilidad de hacer amigos de las alfombras grises se pone de manifiesto una vez más en esta alfombra modelo Samoa, que vemos aquí en una cocina, como podríamos verla también en el salón o en el jardín, así de polivalente es.

Esta es la demostración de que el concepto eclecticismo va parejo a las alfombras grises como el recodo al camino, que dijo el poeta. En este ambiente, la alfombra gris y blanca es el nexo de unión perfecto que necesitaban los muebles de la cocina para fundirse con la isla, todo bajo la cálida y vigilante mirada del suelo de madera en una combinación que fusiona lo rústico y lo moderno. ¡No lo toques! Hagas lo que hagas lo vas a empeorar.