Entre las virtudes de las alfombras de pelo corto destaca la de hacer de desatascador. No, desatascador para el fregadero, no; para eso no las uses. Desatascador de decisiones, queremos decir.
Porque una de las primeras dudas que nos asaltan a la hora de elegir una alfombra es decidir si preferimos una alfombra sin pelo o una alfombra con pelo.
Y esa es una duda importante y complicada. No tanto como pensar qué regalarle a tu cuñado o elegir el momento adecuado para pedir aumento de sueldo, pero casi.
La función desatascadora de las alfombras de pelo corto viene dada por estar justo en medio de ambos mundos.
Por eso vamos a explicar por qué ofrecen el equilibrio perfecto entre decoración y facilidad de limpieza, entre la sensación de calidez hogareña y el sentido práctico.
Alfombras de pelo corto, el discreto término medio
Las alfombras de pelo corto habitan en ese extraño lugar llamado término medio. Un reino que no es ni carne ni pescado y en donde no hace ni frío ni calor. Una especie de limbo alfombril en el que no se contemplan los excesos shaggy ni la austeridad vinílica.
Es como un planeta que no tuviera invierno ni verano, sino una eterna primavera, como Shangri-la. Ya dicen que en el término medio está la virtud, y si hacemos caso a eso las alfombras de pelo corto están llenas de virtudes.
Claro que también hay quien dice que en el término medio está el aburrimiento, pero para eso hay alfombras de pelo corto de mil una texturas y colores, que son cualquier cosa menos aburridas.
Ventajas y desventajas del pelo en las alfombras
Hay dos diferencias principales entre las alfombras con pelo y sin pelo. Y ninguna tiene que ver con la estética, sino con gustos y necesidades de cada cual ¿o es que Woody Harrelson no está tan mono sin pelo como con él?
La primera es la calidez que el pelo, más corto o largo, le pueda aportar a una alfombra.
Aquí la teórica ventaja es de las alfombras con pelo, ya que asociamos de manera instintiva el pelo al carácter acogedor y hogareño, como si nos encantara tener un osito de peluche permanentemente bajo nuestros pies.
La segunda es la facilidad de limpieza y mantenimiento.
Aquí, teóricamente también, las alfombras sin pelo llevarían ventaja porque no dan opción a que la suciedad se acumule y forme hábitats que ríete tú de la selva amazónica. Esto significa que cuanto más pelo tiene un alfombra más complicada de limpiar y mantener será.
Por eso las alfombras de pelo corto nos vienen tan a mano. Porque están a medio camino de la facilidad de limpieza y del aspecto cálido y hogareño.
Porque son la síntesis perfecta que ofrece un mantenimiento razonable y ligero a la vez que sentimos la familiaridad del tejido denso y con pelo que tanto nos gusta apreciar.
Lisa o estampada, densa o suelta, con aguas o sin ellas…
Si alguien cree que acotar las alfombras a una categoría específica como las de pelo corto las va a limitar, va a ser que no: el problema es que podemos elegir alfombras de pelo corto de mil maneras distintas.
- Lisas o estampadas.
- De pelo compacto o suelto.
- Con pelo igualado o recortado a varios niveles.
- Con marcas de pisada (aguas) nada, poco o muy marcadas.
- etc, etc
Con ejemplos se ve mejor.
(Nota: todos estos modelos están en la tienda online a la fecha de elaboración de este post. Busca y en caso de duda, pregúntanos!)
Alfombra pelo corto estilo kilim
Igual pensáis que este precioso kilim de la imagen no es de pelo, sino de nudo, como suelen ser los kilim. Craso error: es de pelo corto.
Bien es cierto que es de un pelo cortísimo, más o menos como la paciencia de un adolescente, pero pelo al fin y al cabo. Más arriba tenéis la foto del primer plano.
Lo mejor es que en sus 2 mm de espesor cabe toda esa decoración que veis y sobra toda la suciedad que no se acumula, porque no tiene dónde.
Es así de fácil y así de resultón.
Alfombra pelo corto compacto y sin aguas
Esta alfombra (modelo alfombra lisa a medida Alem) está concebida para ofrecer un aspecto uniforme y compacto. Es robusta y duradera, haciendo honor a su composición con polipropileno.
Aquí no hay lugar para marcas de pisada, aguas, texturas innecesarias o cualquier adorno que le distraiga de su objetivo principal. Diréis que es un poco espartana, pero precisamente ahí radica su belleza: en ser más dórica que corintia, para entendernos, que no todo van a ser florituras en esta vida.
Aunque su grosor real es de 14 mm, ya en el límite de lo que consideramos pelo corto, es un ejemplo como en las alfombras de pelo importa más la compacidad del pelo, su rigidez y la torsión del hilo más que la mera longitud.
Alfombra pelo corto con aguas y textura
La alfombra a medida Sigma es de las que no te dejan mentir. Porque si pones el pie sobre ella ya pasas a la posteridad. No cometas ninguna fechoría, ya que si llaman al CSI es inútil buscar coartadas: tus huellas hablan por ti.
La textura y riqueza visual de las marcas de pisada o tacto (las aguas, las llamamos, vete tú a saber por qué), es una de las cosas que más vida le da a una alfombra. Siempre que sea ese efecto lo que estés buscando (en caso contrario, véase el ejemplo anterior).
Tanto este como el previo son ejemplos de alfombras compactas de pelo medio-corto y limpieza fácil que no acumularán mucha suciedad si la mantienes míminamente con el aspirador, manual o robot.
Alfombra pelo corto estilo oriental
El modelo Akkad reinterpreta cánones clásicos de alfombras orientales con diseños de nuevo cuño inspirados en patrones atemporales.
Y todo ello lo hace sobre una base de pelo corto, como sus antepasadas persas y afganas. Este tipo de hilado es perfecto para mostrar al detalle los motivos con gran riqueza visual, manteniendo el concepto en su mejor versión.
Alfombra pelo corto de viscosa
Si hablamos de alfombras de pelo corto las de viscosa merecen mención especial. Porque son, con diferencia, las alfombras que se pueden tejer más finas pero sin dejar de ser alfombras de pelo.
Y no solo eso: el modelo Faded Dream, aquí presente, nos demuestra que incluso en grosores tan finos (perdón por la contradicción) hay espacio para recortar el pelo de la alfombra a varios niveles, aumentando de manera asombrosa la sensación de profundidad.
Alfombra pelo corto recortada a varios niveles
Si el modelo anterior recortaba a dos niveles, este modelo Etna (se hace a medida y es de polipropileno) es un maestro del recorte.
En tono liso, como en la imagen, pero también con colores vivos, esta alfombra encierra en sus 10 mm de grosor un potencial decorativo tan complejo que le haría falta un centro de intepretación.
El pelo es compacto y apretado, y el polipropileno es tan lavable que tu esponja y tú vais a hacer muy buenas migas con él. Es otro ejemplo perfecto de alfombra de pelo corto que te hace la vida más fácil y acogedora.
Alfombra pelo corto lavable en lavadora
La alfombra Soft es como su nombre (blandita). Es lavable y lleva la base de fieltro para que la puedas meter en la lavadora sin más trámite. Ni cita previa hay que pedir. (Ya puestos: todas las citas son previas, así que… por qué no las llamamos citas, a secas?)
Pero al grano: se trata de una alfombra lisa de vocación trotona y todoterreno, que tanto nos vale para un roto como para un descosido, entiéndase, para un salón rimbombante o un dormitorio juvenil o infantil.
Una alfombra democrática que no te mira por encima del hombro y que, si después de pasarle el aspirador llega el día que te parece que necesita algo más, la metes en la lavadora y listo. No se enfadará, palabra.
En suma, todo esto (y más que no nos cabe) es lo que las alfombras de pelo corto pueden hacer por ti y por tus suelos.
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