Alfombras de cocina vinílicas, la solución definitiva

Hay sitios que más que lugares son campos de batalla. Y la cocina es uno de ellos, con su guerra diaria con la comida, las prisas y la limpieza. Por eso, como en el delta del Okawango, en ese ecosistema solo sobreviven los más duros: las alfombras de cocina más auténticas y resistentes.

En este otro post te contábamos cómo debe ser la alfombra de cocina perfecta, pero en este queremos poner el foco en un tipo específico que gana enteros para convertirse en la solución definitiva: las alfombras de cocina vinílicas. Y más específicamente todavía, las alfombras de vinilo tejido o trenzado.

Alfombra estampada de cocina

Conviene repasar las necesidades específicas de las alfombras de cocina. Porque para una alfombra irse a la cocina es como que le destinen a la legión extranjera: a cualquier alfombra delicada, de salón o con pelo, le saldrían sudores fríos solo de pensarlo.

Alfombras de cocina, las alfombras estoicas

Su vida consistirá en aguantar estoicamente pisadas continuas, caída inagotable de migas y restos de comida, trasiego de gente de camino a la nevera, lametones de mascotas, sacudidas intempestivas y fregoteos incesantes.

Ya ves que no es fácil en absoluto ser alfombra de cocina. Para recibir más golpes que ellas tendrías que ser Oliver Hardy, el gordo de El Gordo y el Flaco. Como diría Harry el Sucio: es un trabajo duro, pero alguien tiene que hacerlo.

Así que si tus alfombras de cocina son, por decirlo a la manera de Borges, menos resistentes que una cuerda de arena, entonces necesitas una alfombra de cocina vinílica.

Las alfombras de cocina vinílicas serán tus fieles aliadas e incansables compañeras de fatigas. Se convertirán en tus mejores amigas (de ti y de tu cocina) tanto que si te concentras mucho las oirás recitar, como Lope, ¿qué tengo yo, que mi amistad procuras…?

Alfombra estampada de cocina

Pero sin llegar a esos extremos, vamos aclarar qué tienen de particular y por qué son las alfombras más indicadas para el trato duro en la cocina.

Una alfombra de cocina vinílica viene siendo como la 9ª de Beethoven, pero además dirigida por Karajan: sabes que no la vas a encontrar mejor.

Son tan buenas que aunque intenten poner cara de malas no les sale. Y no es por casualidad, sino porque se lo han trabajado. ¿Qué tienen de particular que las hace tan duras? Veamos.

  • En primer lugar, su materia prima. Llámale vinilo, pvc o polipropileno, el caso es que estamos ante un material altamente resistente a la presión y a la abrasión. Vamos, que aguantaría sin pestañear un pleno del Congreso, sin inmutarse.
  • En segundo lugar, su confección de superficie lisa, que no acumula el polvo ni la suciedad y la hace muy fácil de mantener.
  • En tercer lugar, que son muy finas y se quedan más pegadas al suelo que un político a una prebenda, lo cual es muy importante para evitar tropezones, que si son malos en cualquier lugar, en la cocina, todavía más.
  • Y por último, tal vez lo más importante, que su facilidad de limpieza es tan grande que las limpiarás de la misma manera que limpias el suelo: con la fregona, y listo. Esto no lo mejora ni el bote de Pasapalabra (eehhh… si el bote es grande quizá sí).
Alfombra estampada de cocina
Alfombra cocina antideslizante

Así que si tu alfombra de cocina odia la suciedad, con ese tipo de odio, ya sabes, como el que le tienen los marcos de las puertas a las aspiradoras, es el momento de pensar en una alfombra de cocina vinílica.

Alfombras pvc compacto vs alfombras vinilo trenzado

A menudo nos piden que aclaremos cómo es la superficie de las alfombras vinílicas. Porque existe cierta confusión entre dos tipos principales:

  • las alfombras de pvc compacto por un lado y,
  • las alfombras trenzadas, con trama tejida, por otro.
Alfombra cocina estampado flores

Las alfombras de pvc compacto son muy útiles y resistentes, ya que comparten con todas sus hermanas y primas de gama las virtudes habituales (resistencia, facilidad de limpieza, etc).

Pero están confeccionadas por extrusión (perdonando el palabro). Es decir, no son trenzadas, sino una lámina lisa y continua, de una sola pieza. Por así decirlo, como un folio gigante de pvc, que se adhiere a una base antideslizante más o menos gruesa.

Las alfombras de vinilo tejido o trenzado, por el contrario, son alfombras de telar, tejidas con trama y urdimbre. La capa así obtenida se pega mediante termofusión a la base de goma, dando como resultado una alfombra muy fina, de menos de 3 mm de grosor.

Esta diferencia de alfombra compacta de una sola pieza frente a alfombra tejida puede parecer muy sutil, pero tiene su importancia.

La principal diferencia tiene que ver con la prestancia, textura y estética.

Una alfombra tejida siempre tendrá una riqueza visual y una textura apreciable a la vista, producto de su tejido, que es imposible de imitar en una alfombra compacta.

Alfombra de cocina estampada multicolor

Por ese motivo las alfombras de pvc compacto basan toda su estética en el estampado, sin la cual la alfombra no tendría relieve ni profundidad, mientras que las alfombras de vinilo tejido siempre dejan traslucir la trama con independencia de la impresión.

Las alfombras compactas, frente a las de vinilo trenzado, son un poco como un mago al que se le ve el truco. Igualmente prácticas y eficaces, pero limitadas en ese sentido. Y nunca tan resistentes como las tejidas.

Alfombras vinílicas de cocina: diseños y mantenimiento

Una alfombra de cocina ha de ser, además de todo lo que llevamos dicho, alegre y colorista. Que para alfombras tranquilas, discretas, sobrias y elegantes ya tenemos la del salón y muchas otras más.

En la cocina queremos luz, color y alegría. En suma, una alfombra de cocina debe alegrarnos la vista cada vez que entremos en ella (en la cocina, no en la alfombra).

Alfombra impresa de cocina

Son alfombras utilitarias, dicho sea con la mejor de las intenciones, que no tienen la misión de epatar a las visitas ni de crear decoraciones haute couture, sino de vestir ambientes prêt-à-porter, listos para funcionar de manera eficaz y funcional.

Porque en la cocina estamos a lo que estamos, a lo práctico. Y por eso este tipo de alfombras nos ofrecen estampados alegres y variados, con la intención de hacer más llevadero el tiempo que pasamos cocinando (y que tan poco nos agradecen, pero eso no es culpa de la alfombra).

Los estampados están realizados con impresión digital de última generación, con secado instantáneo mediante rayo UV, lo que garantiza colores fijos y permanentes, que no se desvanecen con el tiempo.

¿Cómo las debemos limpiar y mantener?

El mantenimiento de las alfombras de cocina vinílicas es más simple que el mecanismo del botijo o que un átomo de hidrógeno.

Alfombra cocina lavable

Basta con pasarles la fregona y ya está. Por supuesto, las puedes barrer, pasarles la aspiradora, un paño húmedo o incluso una esponja para las manchas recientes o rebeldes.

Pues no es necesario en absoluto. De hecho puede ser contraproducente, porque aunque los estampados están impresos con tintas altamente resistentes y duraderas, la aplicación de productos abrasivos (lejías, quitagrasas o similares) podría atacar los colores con el tiempo.

Sencillamente, no es necesario aplicar más que agua y jabones neutros para la limpieza y disfrutar así de la mejor alfombra de cocina durante mucho, mucho tiempo.